2009-03-22

Un corillo republicano-demócrata en Moscú

¡Qué corillo tan particular el que se dio cita en Moscú hace unos días como avanzada de la venidera visita del Presidente Obama a Rusia! La delegación incluyó al republicano Henry Kissinger, ex Secre de Estado de Nixon-Ford (1973-77) y arquitecto de la política de detente con la Unión Soviética, al republicano George P. Schultz, Secretario de Estado de Reagan (1982-1989) y también Secretario del Tesoro de Nixon (1972-74), al demócrata William Perry, Secretario de Defensa de Clinton (1994-97) y al demócrata Sam Nunn, ex poderoso senador de EEUU (1972-1996) que presidiera el Comité de Servicios Armados y el Comité de Inteligencia, entre otros. Nunn es actualmente CEO del Nuclear Threat Initiative y se sienta en las juntas directivas de Chevron, Dell, Coca Cola y GE. Los miembros de la delegación son cosignatarios de una propuesta de desarme nuclear que incluye una larga lista de ex funcionarios de EEUU en política exterior y asuntos militares. El esfuerzo, iniciado entre Reagan y Gorbachev en los 1980 quedó interrumpido por los acontecimientos que culminaron en el derrumbe del bloque soviético. La renovación de la gestión diplomática incluye negociaciones sobre esfuerzos cooperativos de defensa multilateral de misiles y sistemas de advertencias que habían sido propuestos por los presidentes Putin y Bush II antes de la guerra de Iraq. Los envíados mantienen contactos en Rusia desde la época del "período de relaciones turbulentas", en palabras del NYT en su cobertura del asunto.

Según parece, círculos gobernantes en EEUU están preocupados por la realidad de un mundo saturado de armas nucleares en medio de una depresión económica mundial y en el ambiente de rivalidades por los mercados comerciales y esferas de influencia político-militar. Dichas rivalidades se han acelerado tras el empeño de EEUU en colocar bases de misiles en países del antiguo Pacto de Varsovia y luego del fiasco del intento de ocupación de Ossetia del Sur por parte del gobierno rosado de Georgia (un pet project de EEUU) y la instalación de misiles de EEUU en Ucrania el año pasado. Estos incidentes han motivado el rearme de Rusia y su reorganización como potencia militar. La acción del gobierno de Georgia, por ejemplo, fue interpretada como una acción tras bastidores del gobierno de EEUU y ocurrió en el marco de la renovación del despliegue militar ruso en la zona del Caribe y la promesa de ayuda a Venezuela para el desarrollo de un programa nuclear. Otro motivo para el desarme nuclear puede ser la amenaza de ataque de Israel a Irán, si éste no depone su programa nuclear, objetivo que parece imposible sin la cooperación entre Rusia y EEUU.
De otro parte, James A. Baker III , Secretario de Estado de Bush I (1989-1992) durante el derrumbe del Muro de Berlín y antes de eso Secretario del Tesoro de Reagan (1985-88), "coincidió" en Moscú para participar en una conferencia de políticas acerca de los yacimientos de petróleo y gas del Mar Caspio a los que- tanto Rusia como las potencias de Occidente- buscan tener acceso, según la nota del NYT.

2 comentarios:

Prometeo dijo...

EU y Rusia están jugando ajedrez sobre el tablero mundial. Lamentablemente los perjudicados serán "otra gente" pues esos dos grandes se encargan de que las guerras se peleen en lugares ajenos a sus países.

Adelante y'éxito.

Myrisa dijo...

Las fichas siempre son países ajenos. Pero esto es sintomático de que se acabo el mundo unipolar.