Unos días antes del súbito fallecimiento del periodista de NBC-Meet the Press, Tim Russert, el viernes pasado, una facción militante del Partido Demócrata había iniciado una petición por carta y vía electrónica al periodista. La misma urgía a Russert a dedicarle media hora de la próxima edición de Meet the Press al Representante Kucinich quien el 9 de junio pasado presentó 35 Artículos de Residenciamiento contra el Presidente Bush y tres Artículos de Residenciamiento contra el Vicepresidente Cheney el 24 de abril. (Paisciego añade una lista de vídeos relacionados a este esfuerzo de Kucinich. Búsquenla en la franja derecha.)
“A pesar de haber sido el principal opositor en el Congreso a la invasion y ocupación de Iraq y de su determinación de traer las tropas a casa lo antes posible”, lee la carta, “el Representante Kucinich no ha sido invitado a Meet the Press desde el 23 de mayo de 2004”.
Semanas antes de la invasion a Iraq, un iracundo y molesto Russert cuestionó a Kucinich durante su programa por éste haber dicho que el petróleo era el motivo para la planificada invasión a Iraq: "Do you believe the president of the United States would risk the lives of American men and women for oil?"
El año pasado, Russert y otros periodistas y politólogos se tragaron la lengua cuando fue el mismo Alan Greenspan, ex director de la Reserva Federal quien dijo en su libro The Age of Turbulence: “I am saddened that it is politically inconvenient to acknowledge what everyone knows. The Iraq war is largely about oil.” Pero ni así Russert ni los periodistas que repitieron como papagayos, siguiendo el guión preparado por el club de los neocons de Bush, que Hussein estaba relacionado con el 9-11 y que Iraq poseía armas de destrucción masiva⌐ ni aún con el señalamiento de big daddy Greenspan⌐ reconocieron públicamente su error ni pidieron disculpas al pueblo de EEUU, ni a Iraq, ni al mundo por los sufrimientos causado por esta absurda guerra por el petróleo y el control de la región.
Tim Russert tenía razones adicionales para pedirle disculpas al pueblo de Iraq, al de EEUU y al mundo entero, pues contribuyó desde antes a sembrar las mentiras y medias verdades que le permitieron a Bush ir a la guerra. En el 2000 durante la administración Clinton, Fairness and Accuracy in Reporting (FAIR) señalo cómo la prensa “liberal” mentía consistentemente sobre la retirada de los inspectores de armas, justificando, de esta manera, los bombardeos de Clinton a Iraq (Dessert Fox). Sam Husseini del Institute for Public Accuracy (IPA) dijo recientemente que en entrevista al Vicepresidente Al Gore, en diciembre del 1999, Russert insistió en la versión de que los inspectores fueron expulsados por Iraq y agitó bandera por el regreso de los inspectores. Husseini añade que llamó a la oficina de Russert y dejó mensaje aclarando que los inspectores fueron retirados por Richard Butler de la UNSCOM para permitir el bombardeo de Iraq poco antes del juicio de residenciamiento de Clinton. Pero fue en vano, pues dos semanas más tarde, en entrevista a Madeline Albright, secretaria de Estado, Russert repitió la falsa versión de la expulsión de los inspectores por parte de Hussein. El 21 de junio, mediante carta, el director de comunicaciones del IPA volvió a señalarle el error a Russert. La carta nunca fue contestada de ninguna manera y Russert nunca corrigió su error, inclusive cuestionó en el 2003 al Representante Kucinich cuando éste comentó que el motivo de la invasión a Iraq era el petróleo.
Ya Tim Russert no tendrá oportunidad de corregir su error. Que descanse en paz.
NOTA POSITIVA: Los 35 artículos de residenciamiento a Bush han pasado al Comité de lo Jurídico de la Cámara mediante aprobación de una cómoda mayoría (255 a 161) de todos los demócratas y 24 republicanos (incluyendo, por supuesto, a Ron Paul). Tres demócratas se han convertido en coauspiciadores de la acción.
2 comentarios:
Por algo los homenajes póstumos en las MSM. El tipo era otro de aquéllos y no una Elena Tomás por ejemplo.
La prensa "liberal" todavía no ha hecho confesión de culpa por su complicidad con las mentiras que Bush utilizó para ir a la guerra. No porque fueron engañados (¿el resto del mundo se dio cuenta y ellos no?) sino porque para vender y obtener ratings se fueron con la corriente patriotera que arropó a EEUU tras la desgracia del 9/11, particularmente la prensa de TV. Eso es periodismo amarillo de quincalla, regardless of the razzle dazzle of the newsroom settings.
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